Tuesday, April 3, 2012

Desde Bar Kojba hasta las islas Malvinas

Durante la II Guerra Mundial mi padre fue movilizado y enviado a   en un batallón de castigo y trabajo en el frente ruso  llamados Munka Szolgálatos Századok ( Batallones de Servicio de Trabajo en húngaro).
El el batallón los soldados-presos no llevaban armas, sólo los guardias.  Estos eran dueños de la vida y la muerte.
Muchos soldados (presos) fueron asesinados por los guardias húngaros.
Un día llegó un nuevo cabo guardia al pelotón.
Hizo formar a todos, luego separo a los judíos del resto de los soldados (comunistas y delincuentes), Les hizo quitar la boina y les reviso el cráneo escrupulosamente.
Luego se retiro, visiblemente confundido.
Tiempo después confesó su extraño comportamiento. Provenía de una aldea remota de la Llanura Húngara.  Jamás en su vida había visto a un judío. Cuando se enteró que iba tratar con soldados-presos judíos pregunto al Sr. Cura por información.
El cura entre otras cosas, le dijo, que los judíos andaban con sombrero, para esconder así los cuernos de Satanás que tenían en la cabeza.
Desde luego al ver que no tenían cuernos, con el tiempo se transformo en el guardia que mejor trato dispensaba a los judíos en la compañía, tal vez en la batallón entera.

Me vino en mente este hecho y dos más sobre las andanzas de mi padre en la II Guerra Mundial a ayer 2 de Abril cuando se conmemoran 30 años del inicio de la Guerra de las Malvinas. He leído varios enlaces y testimonios sobre la triste situación de los soldados argentinos de origen judío y los maltratos que recibieron muchos, no todos, de sus superiores argentinos “arios”.
Entre la Rebelión de Bar Kojba 132-135  y la  Guerra de Independencia de Israel 1948-49 los judíos hemos peleado, sangrado y muerto en muchas guerras lo que yo llamo “ajenas.”
En vano, sólo servimos como carne de cañón para las demás naciones. Pero no había alternativa. Pero desde 1948 SI tenemos  el deber y privilegio de pelear nuestras guerras. Es muy triste que aún hay jóvenes judíos que visten uniformes y vayan a pelear guerras que no son de Israel.
Realmente este es la primera parte de una Trilogía (que nombre tan solemne) sobre las aventuras de mi progenitor en la II G.M. Dios mediante mañana publicaré la segunda parte.
Os invito cordialmente leerlo.


Epilogo de la primera parte:


El 1 de marzo de 1920 un grupo de árabes armados atacó el asentamiento de Tel Hai, siendo este el primer intento nacionalista árabe de destruir una posición judía en el conflicto árabe-israelí.  Yosif Trumpeldor encabezó la defensa del lugar y rechazó a los atacantes luego de infringirles muchas bajas, pero en el transcurso de la batalla fue herido de muerte. Sus últimas palabras, "No importa. Vale la pena morir por NUESTRA patria" ("Ein davar. Tov lamut be'ad hartzeinu"), lo convirtieron en un símbolo de pionero y combatiente para el movimiento sionista, adoptando esta famosa frase como un ejemplo de la autodefensa judía.

(Copiado de Wikipedia)

7 comments:

  1. Buenas tardes.

    No entiendo la frase, “Es muy triste que aún hay jóvenes judíos que visten uniformes y vayan a pelear guerras que no son de Israel.”

    Afortunadamente la nacionalidad de una persona no la define la religión que profesa. Las injusticias pasadas o presentes no cambian este hecho.

    La patria de un soldado argentino (cristiano, judío o musulmán) es Argentina, y como soldado que es luchará por su nación. La patria de un soldado británico (cristiano, judío o musulmán) es Gran Bretaña, y como soldado que es luchará por su nación.

    ¿Son “ajenas” las guerras de sus naciones, de sus patrias, por pertenecer a una religión determinada, la judía? ¿Un soldado de cualquier nacionalidad, si profesa la religión judía, tiene “el deber y privilegio” de participar en las guerras de Israel?

    Debo estar un poco espeso. Supongo que no habrá querido decir eso, que sencillamente no he entendido correctamente el sentido de su texto y le presento mis disculpas por adelantado; pero sinceramente es la impresión que da.

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    1. No tiene que disculparse Anonymous para nada.En este espacio hay una libertad de expresión sólo limitada por las palabrotas. Hasta un "carajo" bien puesto es aceptado.
      A ver si estas pocas palabras le hacen entender un poco mejor el tema.Ser judío no es sólo pertenecer a una religión (de hecho muchos judíos son ateos y/o agnósticos, sino pertenecer a una nación. A la nación de Israel. Los nazis lo tenían bien claro. Ni los conversos de la segunda generación se salvaron. Hablo de la Europa ocupada.
      En los campos hasta habían sacerdotes cristianos cuyo único delito era tener uno o más abuelos judíos.


      Un saludo afectuoso y gracias por su opinión.

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    2. Buenas tardes, Sr. AmirGlubus.

      Entiendo lo que usted quiere decir pero no estoy de acuerdo porque su argumento, “ser judío no es sólo pertenecer a una religión…, sino pertenecer a una nación. A la nación de Israel”, no deja de ser su concepción personal de las implicaciones que tiene ser judío en otro país y que no dudo que algunas personas puedan compartir.

      La nación, la patria y la nacionalidad no vienen dada por la pertenecía a una religión, ni siquiera por la pertenecía a una etnia. Para ser realistas, la pertenencia a las etnias tienen su importancia en África y otros lugares del planeta donde todavía padecen el tribalismo. Pero estamos hablando de Argentina, Gran Bretaña…, es decir, de países desarrollados donde todos los ciudadanos forman un cuerpo común con los mismos derechos y obligaciones.

      Puedo entender que miembros de la comunidad judía de esos países sientan empatía por la suerte de Israel por los antecedentes históricos, pero no que en general sientan que su nación sea Israel, tal como usted afirma.

      El régimen nazi, con sus ideas disparatadas y malignas, ha sido el más abyecto de toda la historia. No quisieron entender ni aceptar que los judíos de Alemania eran sus compatriotas. Los presentaron como seres diferentes, como “cosas” ajenas a su país, para poner en marcha un exterminio horrible.

      Los ciudadanos españoles, con sus filias y fobias, lo son por el hecho de haber nacido en España, lo demás (religión, ideología, etnia,…) es accesorio. Pretender que lo accesorio defina nacionalidad o la patria alguien es engañarse a uno mismo.

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  2. Amir, debo decirte que este corto articulo es uno de los mejores que he leido de ti. La frase “Es muy triste que aún hay jóvenes judíos que visten uniformes y vayan a pelear guerras que no son de Israel.” es fuertisima!!
    me identifico totalmente, aunque la idea es triste pero la realidad del antisemitismo es mas triste aun. gracias

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  3. Siendo los judíos deportados a los campos de exterminio nazi, los veteranos de la Gran Guerra (entre ellos un abuelo mío) pusieron en su pecho las condecoraciones recibidas. Como diciendo: Así nos están pagando. Para nada les sirvió haber defendido su "patria" en forma sobresaliente con honor.
    Muchos gendarmes húngaros jóvenes,encargados de llevarlos a las estaciones de trenes, bajaron la vista por vergüenza, algunos hasta lloraron en silencio.

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  4. Yo sigo pensando q Israel no puede ser la última frontera. Hay q pelear cada línea, cada milimetro, cada sitio, para q cada judío pueda vivir donde desee.

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